* Orígenes de la conspiración contra el Perú

¿Cuáles son los orígenes de la conspiración contra el Perú? ¿Quiénes son los participantes en este atentado contra la patria?

Desde los orígenes de la llamada independencia nos ha gobernado una clase retrógrada y pro-española que fueron los herederos de todas las riquezas usurpadas. La aristocracia terrateniente y minera solamente velaba por mantenerse como propietaria de terrenos que pertenecieron a las comunidades tradicionales y no le interesó jamás el desarrollo de la sociedad peruana dejando intacto el lacerante problema de la tierra y del indio. Esa aristocracia incursionó en los aparatos armados para tomar los respectivos comandos militares y reemplazó a la curia española de 1821 y en una trilogía macabra defendieron sus intereses masacrando campesinos, mineros salitreros, guaneros y de socavones, así como trabajadores en las haciendas azucareras.

Una revolución o cambio en la sociedad peruana para terminar con esa odiosa situación no es simplemente un hecho de inspiración ni de espontaneidad. Ello es y tiene que ser una necesidad, una obligación patriótica o en caso contrario nos seguiremos hundiendo en la miseria. En casi 200 años de república los peruanos hemos visto solamente un intento de cambio de las estructuras sociales en el Perú, intento que ejecutaron los miembros de la Junta militar que encabezó el General de División EP Juan Velasco Alvarado desde el 3 de octubre de 1968. El pueblo fue sorprendido gratamente cuando nacionalizaron el petróleo y tomaron para el Estado todas las instalaciones de la International Petroleum Company de la Standard Oil. Dieron decretos para la Reforma de la Educación; la Reforma Industrial y empresarial; la Reforma Agraria; la Reforma del Sistema de Salud; y otros; y con ello cautivaron a los peruanos que vivían esperanzados en un porvenir promisorio para sus hijos.

Todos se adhirieron para reforzar las reformas. No era necesario que algún partido comunista subiera al poder para efectuar la transformación del Perú pero estos no entraron para competir con los gobernantes ni decir “ellos están copiando los planes del partido” sino que se aglutinaron para defender el desarrollo peruano. Por ello fueron creciendo las fuerzas de izquierda porque dejando del lado el egoísmo político apoyaron sin reservas y desde el llano toda medida tendiente a favorecer a las mayorías. Estados Unidos nunca vio con buenos ojos la ejecución del proyecto peruano de desarrollo y comenzó a minar las bases recortando los créditos y restringiendo toda importación solicitada por el Perú. Ante esto la multitud respondió solidariamente.

En agosto de 1975 un grupo de oficiales encabezados por Francisco Morales Bermúdez Cerrutti derrocaron al General de División EP Juan Velasco Alvarado y de inmediato instituyeron un gobierno sanguinario y hambreado poniendo en marcha el “toque de queda” y la suspensión de las garantías que significan la suspensión de los derechos humanos, como medidas de intimidación o amedrentamiento. Se le dio muerte a mucha gente que salía tarde del trabajo o que se iba a trabajar en los turnos de amanecida y, según fuentes castrenses, ello se hizo “para que sirviera de ejemplo”. Los traidores, como han sido llamados Morales Bermúdez y sus secuaces,, comenzaron a desactivar todas las reformas y logros alcanzados e insertaron en los planes peruanos los lineamientos de política económica del Fondo Monetario Internacional, vale decir que habíamos perdido independencia económica y nuestra soberanía.

Un 19 de julio de 1977 el pueblo reaccionó contra los retrógrados en el poder y realizó un paro general de 48 horas que paralizó a todo el Perú. Se desató la represión y el maltrato a las personas y simultáneamente los militantes de Sendero Luminoso comenzaron a organizar una guerrilla sin que ello fuera advertido por los servicios de inteligencia. El pueblo comenzó a sobrevivir con los “paquetazos” del tirano Morales Bermúdez mientras el país parecía ocupado por fuerzas militares.

Así nos quitaron el privilegio de convertirnos en un país desarrollado o un paás francamente en desarrollo. Nuestro dedo apunta contra Morales Bermúdez, Sendero Luminoso y contra todos los gobernantes que llegaron después de ese traidor.